Según la última Encuesta de Población Activa, en Andalucía la tasa de paro se sitúa en un 19%. Aunque elevada aún, es casi un punto porcentual más reducida que la que la autonomía mostraba hace un año y lleva ya tres trimestres consecutivos situándose por debajo del 20%.
Sin embargo, aunque pueda parecer paradójico, el 53% de los directores/as de recursos humanos de nuestro país (+18,3 p.p. interanuales) reconoce tener problemas a la hora de reclutar talento para su compañía ya que escasean ciertos perfiles cualificados en el mercado laboral que son muy demandados y, además, consideran este como el principal problema al que su empresa ha de hacer frente en los próximos meses, por encima incluso del estado general de la economía.
El pasado 2022 fue un año de crecimiento generalizado del empleo -tras las dificultades de 2020 y 2021- pero los datos del último trimestre del año ya evidencian un aumento mucho más lento de la creación de puestos de trabajo a nivel general. ¿Producirá esto un nuevo ajuste entre la oferta y la demanda de perfiles en el mercado de trabajo?
Lo cierto es que aun así hay sectores donde la falta de profesionales cualificados (por razones formativas, de fuga de talento a otros países, por la poca atracción hacia ciertos sectores con condiciones de trabajo más duras, por la falta de relevo generacional, etc.) viene siendo una tónica de nuestro mercado laboral desde hace años.
Andalucía no es una excepción y en la región existen varios sectores donde reclutar candidatos/as es especialmente arduo, lo que convierte a esos perfiles en los profesionales ideales para las empresas y las posiciones ideales en las que formarse o reciclarse para los candidatos/as.
En este contexto, Adecco, líder mundial en gestión de recursos humanos, de la mano de su división Adecco Staffing (que ofrece soluciones de trabajo temporal, selección directa, RPO, estructuras onsite, formación y consultoría de RRHH) quiere mostrar qué sectores de actividad están buscando candidatos de forma más intensa en cada autonomía y lo presenta en su Informe Adecco sobre Perfiles más demandados.
Si bien cada autonomía tiene sus peculiaridades, hay ciertos perfiles que se están viendo más afectados por esta escasez a nivel general en todo el país. Es el caso de los/as profesionales del ámbito IT (que llevan años siendo los puestos más difíciles de cubrir y cuya demanda crece de forma exponencial sin poder formar al suficiente personal que sale de universidades, centros de FP y similares para cubrir esa alta demanda); del personal sanitario (si bien siempre han sido profesionales muy buscados, desde el estallido de la crisis sanitaria son más demandados que nunca a cualquier nivel: auxiliares, DUES, médicos/as, técnicos/as de laboratorio en la parte de Lifescience…); y de los perfiles técnicos y/o con titulación de FP asociados al desarrollo de la Industria como electromecánicos/as, carretilleros/as, soldadores/as, oficios, operarios/as para el sector de la alimentación, técnicos/as de calidad y de mantenimiento.
Pero también sucede esta escasez al buscar perfiles cualificados asociados al desarrollo de los Servicios como es el caso de comerciales y administrativos/as con idiomas, teleoperadores/as, y personal de hostelería (los últimos dos años ha podido apreciarse con más intensidad que nunca la falta de personal cualificado para cubrir la alta demanda de puestos que la reactivación de la actividad turística y hostelera tras la crisis sanitaria trajo asociada); y también, en general, es el caso de los ingenieros/as.
De hecho, muchos de todos estos perfiles gozan de lo que técnicamente se denomina pleno empleo o paro cero.
Tras esta carencia existen varios motivos que explican la situación y que tienen diferente origen y ámbito de actuación. Por ejemplo, la escasez de perfiles cualificados y bien formados en ciertos ámbitos (la Formación Profesional tiene una alta demanda especialmente dentro del sector industrial, muy por encima de la oferta existente, por ejemplo, y desde hace varios años es más solicitada en las ofertas de empleo que las titulaciones universitarias pero sigue teniendo menor tasa de matriculación de alumnos), el dominio de idiomas -cada vez más se solicita el conocimiento de una tercera lengua-, o la aplicación de las políticas activas de empleo (inversión en formación para el empleo, la escasa colaboración público-privada, errores en el diagnóstico de profesiones y sectores diana, falta de orientación y promoción de la búsqueda activa de empleo, etc.).
También se puede destacar la búsqueda de candidatos muy especializados, los turnos cambiantes para determinados puestos, los salarios poco competitivos en algunas regiones y para posiciones concretas y la falta de relevo generacional en algunos sectores menos atractivos para los jóvenes (por salarios bajos, penosidad, condiciones, etc.). Todo ello está provocando esta escasez de talento que en algunas autonomías ya es crítica.
En este contexto, para todas aquellas personas que están planteándose su futuro laboral, así como para aquellas en situación de desempleo que quieren reorientar su carrera profesional, en este informe encontrarán aquellos perfiles que las empresas necesitan incorporar, la mayoría de los cuales gozan de pleno empleo o tienen un índice de inserción laboral muy elevado. Son los perfiles que más están demandando las empresas en estos momentos de manera más urgente y con mayor volumen de demanda.
Los sectores y perfiles con más tirón en Andalucía
En la autonomía andaluza, son ocho los sectores que cuentan con posiciones difíciles de cubrir actualmente y que más mano de obra están reclamando.
En primer lugar, podemos hablar del sector IT, donde, especialmente en las provincias de Sevilla y Málaga, escasean los perfiles de ciberseguridad, los/as desarrolladores web y posiciones similares como programadores/as, diseñadores/as web, etc. El principal obstáculo en la región para cubrir estas posiciones es el alto perfil cualificado del que se trata. Los perfiles IT tienen en común la necesidad de tener una formación superior (ya sea ingeniería, grado o Formación Profesional) muy específica y en constante evolución (aunque cada vez más se apuesta por otro tipo de formaciones como bootcamps o similares para tratar de aligerar esta brecha formativa).
Son profesionales escasos en el mercado, gozan prácticamente de pleno empleo y forman parte de un prototipo de candidato que trabaja por proyectos, de ahí la dificultad para captar nuevos profesionales. A todo esto, hay que añadir la brecha de género que vive este sector, ya que no es capaz de atraer talento femenino a sus posiciones a pesar de las remuneraciones y la cantidad de ofertas vacantes. Las mujeres apenas ocupan 1 de cada 4 puestos de trabajo relacionados con las llamadas STEM.
Otro sector que merece una mención especial en esta escasez de talento es la hostelería y el turismo. Ya son dos veranos en los que el sector ha puesto de manifiesto la acuciante necesidad de encontrar mano de obra cualificada, especialmente desde que se ha recuperado totalmente la actividad, tan disminuida durante 2020 y 2021. El verano pasado, en plena campaña estival -la más potente para el sector andaluz-, los empresarios denunciaron las dificultades que estaban teniendo para incorporar trabajadores/as especializados o con formación/experiencia en hostelería. Los prolongados ERTE que hicieron que muchos trabajadores/as del sector se reubicaran en otras actividades, el déficit que ya existía desde antes de la pandemia, la estacionalidad de muchas campañas en ciertas zonas y la poca movilidad interna, entre otros factores, hacen que cada vez sea más complicado cubrir los puestos que necesita una industria clave para la economía de la región.
Así en la autonomía andaluza se necesitan principalmente ayudantes de camareros/as, ayudantes de cocina y cocineros/as, aunque cualquier tipo de perfil dentro del sector tiene fácil colocación en el mercado laboral regional.
Con el sector agroalimentario de mayor tamaño de España, que emplea a 1 de cada 5 personas de nuestro país dedicadas a esta actividad, Andalucía busca continuamente trabajadores/as. Las continuas campañas hortofrutícolas en diferentes puntos de la región y en distintos momentos a lo largo del año -la región tiene la mayor extensión dedicada a esta actividad de nuestro país- hace que se busquen con asiduidad recolectores/as, manipuladores/as y envasadores/as.
Cuando se habla de escasez de talento en el sector industrial hay dos perfiles que destacan por encima de los demás, casi independientemente de la rama de actividad industrial en que nos fijemos: electromecánicos/as y técnicos/as de mantenimiento. En este caso, la carencia de talento viene motivada por una mezcla entre los pocos profesionales cualificados y con experiencia que existen, necesarios para que no cese la actividad de las empresas pues realizan mantenimientos preventivos y correctivos en las líneas de producción, y la alta movilidad de estos perfiles por motivos salariales derivados precisamente de ese desajuste entre oferta y demanda.
Y si bajamos a ramas de actividad concretas dentro de la industria, por ejemplo, el sector de la distribución y el retail está demandando perfiles como dependientes/as, cajeros/as y reponedores/as. Estas profesiones tienen mayor demanda que oferta por lo que siempre son puestos muy buscados en la autonomía.
Algo similar ocurre en la logística y el transporte que está demandando posiciones como preparadores/as de pedidos, carretilleros/as con titulación oficial y repartidores/as.
Del lado de los servicios, el área comercial tiene dificultades para encontrar comerciales, especialmente, si a estos/as se les requiere con conocimiento de otros idiomas, algo por otra parte cada vez más habitual para este tipo de puestos.
Por último, el sector contact center está en búsqueda continua de teleoperadores/as de venta y a lo largo de 2022 varios han sido los procesos de selección masivos abiertos en la región para reclutar candidatos y candidatas con este perfil.
Qué busca cada autonomía
Como ya hemos mencionado al inicio del informe, existen profesiones que gozan de una alta demanda en la mayoría de comunidades autónomas de nuestro país como los profesionales del sector tecnológico, electromecánicos/as, personas formadas en oficios (desde soldadores/as a electricistas y mecánicos/as), técnicos/as de mantenimiento, técnicos/as de calidad, personal de hostelería, operarios/as especializados (industriales, agrarios) o administrativos/as, dependientes/as y agentes telefónicos. Sin embargo, existen autonomías con características propias en la demanda y contratación que las diferencian del resto: